Bizcocho esponjoso de calabaza y yogur
Este delicioso y esponjoso bizcocho de calabaza y yogur es una combinación única e irresistible. La calabaza le da un sabor dulce y aromático, mientras que el yogur le aporta una textura suave y esponjosa. Además, el toque de canela y nuez moscada le da un toque de sabor especiado que lo hace aún más delicioso. Su textura es ligera y esponjosa, y su sabor es simplemente delicioso. Es una receta sencilla y rápida de hacer, ¡ideal para cualquier momento del día!
Por qué te encantará esta receta
- Un abrazo de sabores otoñales - El yogur y sus notas cremosas se funden en una danza de dulzura, capturando la esencia de las hojas caídas y las tardes de sofá y serie.
- Cada bocado, una nube - La textura de este dulce es tan esponjosa que cada mordisco te eleva a un estado de placer culinario, convirtiendo lo cotidiano en un festín para los sentidos.
- Un éxito sin complicaciones - La sencillez de su elaboración es inversamente proporcional al éxito que tendrás al presentarlo; en menos de una hora, tendrás una obra maestra que deslumbrará en cualquier mesa.
Los imprescindibles para tu bizcocho
- Calabaza - La estrella del show. Si disfrutas pelando y cocinando, hazte con una fresca y transfórmala en un puré casero. ¿Vas con el tiempo justo? El puré en lata te salvará la vida, ¡y nadie notará la diferencia!
- Yogur natural - Este es el secreto para una textura que se deshace en la boca. Yo suelo decantarme por un yogur griego; le da un toque de cremosidad que es puro lujo.
- Aceite de oliva - No escatimes aquí, un buen aceite de oliva virgen extra es el alma de una delicia húmeda y llena de sabor. ¡Verás qué diferencia!
- Huevos - Asegúrate de que están frescos y a temperatura ambiente. Son el lazo que une todos los sabores, así que merecen todo tu cariño.
- Harina, levadura y bicarbonato - El trío que nunca falla. Estos son los arquitectos, los que elevan tu postre a la esponjosidad máxima.
- Especias - Canela y nuez moscada, el dúo dinámico que nunca decepciona. Añade una pizca extra si te atreves, y deja que su aroma te transporte a esos días de manta y peli.
Preparación de la calabaza
¡Vamos a dar vida a nuestro delicioso bizcocho con la estrella de la receta: ella! Recuerdo cuando era pequeña y mi madre me enseñó a pelar y cortar por primera vez. Era un momento mágico, lleno de risas y manos naranjas. Si tienes una calabaza fresca, retira la piel y las semillas con cuidado usando un cuchillo afilado. Luego, córtala en trozos uniformes y cocínala al vapor durante aproximadamente 20 minutos, o hasta que esté tierna al pincharla con un tenedor. Si prefieres usar puré en lata, asegúrate de que esté bien escurrido para evitar añadir exceso de líquido a la mezcla. Una vez cocida, tritúrala en un procesador de alimentos o licuadora hasta obtener un puré suave y cremoso. ¡Disfruta del proceso y prepárate para disfrutar de un bizcocho esponjoso y delicioso!
¡Aventura en la cocina con los ingredientes secos!
Prepárate para la alquimia culinaria: es hora de que la harina, la levadura, el bicarbonato y las especias se unan en un hechizo transformador que elevará nuestra mezcla a la categoría de celestial. Siente la emoción de convertir tu cocina en un santuario de olores y sabores otoñales. ¡Vamos a ello!
- Comienza por tamizar la harina con la levadura y el bicarbonato. Cada vez que lo hago, me transporto a esos días de infancia en los que la cocina era mi laboratorio de experimentos. Este simple gesto es el secreto principal para que tu pastel logre la suavidad soñada.
- Ahora es el turno de las especias. Un toque generoso de canela, un suspiro de nuez moscada, y tu cocina se viste de otoño. Si te sientes aventurero, ¿por qué no añadir un pellizco de jengibre? A veces, esos pequeños cambios son los que crean recuerdos inolvidables.
- Con ternura, une los secos con los húmedos. Piensa en ello como si estuvieras tejiendo un delicado tapiz de sabores. La paciencia aquí es tu mejor aliada; la delicadeza es el camino para que tu creación culinaria se eleve hacia el cielo de la repostería.
En cuanto la masa se vea uniforme y acogedora, estarás a un paso de presenciar el encanto del horneado. Pero esa, querido lector, es una historia que reservaremos para el gran final.
Horneado del bizcocho
¡Es hora de darle vida a nuestra suculenta preparación de yogur! Precalienta el horno a 180 grados centígrados para que esté listo y caliente cuando introduzcamos nuestra creación. Mientras tanto, prepara el molde engrasándolo y enharinándolo generosamente para evitar que la masa se pegue.
Una vez que tengas la mezcla lista, vierte suavemente la masa en el molde preparado y alisa la superficie con una espátula para asegurarte de que esté uniforme y lisa. Hornea durante 25-30 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro salga limpio y seco. Esto significa que estará perfectamente cocido y esponjoso, listo para deleitar a tus invitados.
Una vez listo el postre, extrae el molde del horno y permítele enfriarse durante 10 minutos. Desmolda con cuidado y deja enfriar completamente en una rejilla antes de servirlo. ¡Disfruta de este delicioso manjar otoñal!
Receta
Bizcocho esponjoso de calabaza y yogur
Tiempo de preparación: 20 minutos
Tiempo de horneado: 45-50 minutos
Un delicioso bizcocho esponjoso de calabaza y yogur, perfecto para el otoño y para disfrutar en cualquier momento del día.
Ingredientes
- 300 g de calabaza cocida y triturada
- 250 g de yogur natural
- 125 ml de aceite de oliva suave
- 3 huevos L
- 200 g de azúcar moreno
- 300 g de harina de trigo
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 1 cucharadita de bicarbonato sódico
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- 1/2 cucharadita de jengibre en polvo
- Una pizca de sal
Instrucciones paso a paso
- Precalienta el horno a 180ºC (arriba y abajo) y engrasa un molde para bizcocho de 22 cm de diámetro. Reserva.
- En un bol grande, mezcla el puré, el yogur, el aceite y los huevos. Asegúrate de que estén bien integrados.
- Añade el azúcar moreno a la mezcla anterior y bate hasta que esté completamente incorporado.
- En otro bol, tamiza la harina junto con la levadura, el bicarbonato, la canela, la nuez moscada, el jengibre y la sal.
- Incorpora los ingredientes secos a la mezcla húmeda, poco a poco, y mezcla suavemente con una espátula hasta que no queden grumos.
- Vierte la masa en el molde preparado y alisa la superficie con una espátula.
- Hornea el bizcocho durante 45-50 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro salga limpio.
- Deja enfriar en el molde durante 10 minutos antes de desmoldarlo y dejarlo enfriar completamente sobre una rejilla.
Notas:
- Puedes sustituir el aceite de oliva por aceite vegetal si lo prefieres.
- Si quieres darle un toque extra de sabor, puedes espolvorear un poco de canela y azúcar moreno por encima del bizcocho antes de hornear.
- En un recipiente hermético a temperatura ambiente, se mantiene fresco durante 3-4 días.