Bizcocho de calabaza y queso philadelphia
Prepárate para deleitar tus sentidos con el bizcocho de calabaza y queso Philadelphia, un auténtico manjar que te transportará a un rincón acogedor.
Imagina el suave y esponjoso bizcocho, con un delicado toque de canela, jengibre y nuez moscada que evocan los aromas del otoño. La cremosidad del queso Philadelphia envuelve cada bocado, creando una explosión de sabores que te cautivará.
Ya sea para disfrutar como un postre reconfortante o acompañar una comida especial, este bizcocho de calabaza y queso Philadelphia es la elección perfecta. Sigue nuestra receta sencilla y prepara en casa un plato casero que parecerá salido de la cocina de un experto pastelero.
Los ingredientes imprescindibles
¡Prepárate para descubrir los ingredientes que harán de este bizcocho de calabaza y queso Philadelphia una auténtica delicia!
- Calabaza asada o cocida y triturada - Esta estrella de la receta aporta una suavidad y humedad que envuelve cada bocado, transmitiendo esos aromas cálidos y otoñales que tanto nos gustan.
- Queso Philadelphia - Su cremosidad y riqueza se funden a la perfección con la calabaza, creando una textura sedosa y una explosión de sabor que cautivará a tus invitados.
- Azúcar - Imprescindible para lograr ese equilibrio perfecto entre lo dulce y lo salado, dando ese toque caramelizado tentador al bizcocho.
- Huevos - Son los encargados de inyectar esa esponjosidad y ligereza que nos hace suspirar en cada mordisco. Asegúrate de usar huevos frescos y de calidad.
- Harina de trigo - La estructura que sostiene todos los sabores y texturas, contribuyendo a ese resultado final irresistible.
- Levadura química o polvo de hornear - El pequeño empujón que necesita el bizcocho para alcanzar una suavidad y esponjosidad excepcionales.
- Especias - La canela, la nuez moscada y el jengibre en polvo aportan ese toque cálido y aromático que evoca los días de otoño.
- Aceite de girasol o vegetal - Ayuda a conseguir esa suavidad y jugosidad que hace que este bizcocho se deshaga en la boca.
Preparación: un viaje delicioso
Llega el momento estelar: transformar los maravillosos ingredientes en una obra maestra culinaria. Sigue atentamente estos pasos y déjate cautivar por el exquisito bizcocho de calabaza y queso Philadelphia que se horneará ante tus ojos.
Primer paso: preparar los elementos clave
Comienza por precalentar el horno a 180°C y engrasar generosamente un molde de 20 cm de diámetro. Esto asegurará que el bizcocho se despegue sin problemas una vez horneado. Mientras tanto, tamiza en un bol la harina, la levadura, la canela, la nuez moscada, el jengibre y la sal. Obtendrás así la mezcla de ingredientes secos que dotará de estructura y aromas a tu creación.
Magia de los ingredientes húmedos
En otro recipiente, bate con vigor los huevos y el azúcar hasta que blanqueen y aumenten notablemente de volumen. Luego, incorpora la cremosa calabaza triturada y el queso Philadelphia. Mezcla bien hasta lograr una masa cremosa y homogénea, lista para recibir los aromas especiados.
Uniendo todos los elementos
Llega el momento de combinar lo dulce, lo salado y lo especiado. Incorpora poco a poco los ingredientes secos a la mezcla húmeda, integrándolos con suaves movimientos envolventes de espátula. Finalmente, vierte el suave aceite y sigue mezclando hasta obtener la masa lista para hornear.
El toque final: horno y enfriamiento
Vierte la preparación en el molde engrasado y hornea durante 40-45 minutos, o hasta que al introducir un palillo en el centro salga completamente limpio. Deja reposar en el molde durante 10 minutos, desmolda con cuidado y enfría por completo sobre una rejilla. Así, tu bizcocho de calabaza y queso Philadelphia estará listo para cautivar a tus comensales.
Decoración y presentación
Llega el momento de realzar la belleza de tu bizcocho de calabaza y queso Philadelphia. Para darle el toque final perfecto, puedes espolvorear un poco de azúcar glass sobre la superficie. Este gesto sencillo le aportará un aspecto elegante, convirtiéndolo en un postre que seguro llamará la atención.
Una vez listo, corta el bizcocho en generosas porciones y sírvelo acompañado de una bola de helado de vainilla o un poco de nata montada. La cremosidad del queso Philadelphia y la suavidad de la masa contrastarán deliciosamente con la frescura del helado o la nata, creando una explosión de sabores que fascinará a tus invitados.
Tras haber seguido con cuidado los pasos de la receta, ahora es el momento de disfrutar de este delicioso postre. Ya sea para una reunión informal o una ocasión especial, esta creación será sin duda uno de los protagonistas de la mesa.
Receta
Bizcocho de calabaza y queso Philadelphia
Este delicioso bizcocho combina a la perfección el sabor acaramelado de la calabaza y la cremosidad del queso Philadelphia, creando una textura irresistible. Ideal como postre o acompañamiento para el té o el café, su preparación es sencilla y los resultados son espectaculares.
Ingredientes
- Calabaza asada o cocida y triturada: 250 g
- Queso Philadelphia: 300 g
- Azúcar: 200 g
- Huevos: 4 unidades
- Harina de trigo: 200 g
- Levadura química o polvo de hornear: 1 cucharadita
- Canela en polvo: 1 cucharadita
- Nuez moscada: 1/2 cucharadita
- Jengibre en polvo: 1/2 cucharadita
- Sal: 1 pizca
- Aceite de girasol o vegetal: 100 ml
- Azúcar glas (para decorar, opcional): al gusto
Instrucciones paso a paso
- Precalienta el horno a 180°C y engrasa un molde de 20 cm de diámetro.
- Tamiza la harina, la levadura, la canela, la nuez moscada, el jengibre y la sal en un bol.
- En otro bol, bate los huevos y el azúcar hasta que blanqueen. Incorpora la calabaza triturada y el queso Philadelphia, y mezcla bien.
- Agrega los ingredientes secos a la mezcla húmeda, incorporándolos suavemente con una espátula. Añade el aceite y mezcla hasta obtener una masa homogénea.
- Vierte la masa en el molde y hornea durante 40-45 minutos, o hasta que un palillo introducido en el centro salga limpio.
- Deja enfriar el bizcocho en el molde durante 10 minutos, luego desmolda y enfría completamente sobre una rejilla.
- Espolvorea azúcar glas por encima antes de servir (opcional) y disfruta de este delicioso bizcocho, solo o acompañado de una bola de helado de vainilla o nata montada.